¿Dulce o putada?: Trick or treat

Si fuese una niña americana seguro que lo que pasaría por mi mente al ir disfrazada en estas fechas tocando los timbres (y otras cosas) de mis vecinos sería: ¿O me das algo bueno o te enteras? Siempre he oído "¿truco o trato?" pero si intentamos disfrutar de la fiesta en nuestras carnes debemos pensar que para llegar a un trato debe haber una amenaza: si me das un puñado de caramelicos me voy tranquilamente; si te niegas te tiro huevos. Será porque nunca pillé ningún truco de magia que hacían delante de mis narices por lo que eso que la gente llama treat-truco lo traduzco como (mini)putada. Obviamente no hay trato pues desconocen en el momento de ofrecerte chocolatinas, torrijas o peladillas qué pasaría si no te dan nada. Digamos que los vecinos pagan el impuesto revolucionario para que no le hagan ningún "truco".

Pero por no ser niña ni americana me planteo cómo será darle calabazas -literalmente- a alguien la noche de Halloween. Decir: "Cariño.... ahí te dejo las calabazas (bellamente talladas)" y desaparecer de su vida.
Que el tiempo que dure el olvido sea el que tarde la calabaza en apestar.