Ya llega el final.
Mañana vuelvo a casa, y cierro el blog por vacaciones.
Me hablan de treinta y pico grados ¡y yo con camisa y chaqueta!
Reconozco que me he afrancesado, el otro día tuve un sueño bastante extraño, dormia con una almohada de queso rallado. Sí, funda transparente y rellena de queso. ¿Influencia de los crêpes? No sé, una especide de bosa de queso rallado gigante y mi cabeza adormecida encima, normal, normal... no es.
Au revoir paradis!
Sigo con mi dilema: ¿Cómo meter todoen la maleta?
1 comentario:
Lastima, espero que vuelvas...
Suerte!
Publicar un comentario